El ESTRÉS situacional (Parte I)
No dejes que el resultado de tu APTO no dependa de ti mism@
Muchas veces tenemos el conocimiento técnico y la pericia suficiente para llegar al resultado querido, pero finalmente no lo conseguimos ¿a qué se debe? ¿por qué si me sabemos el temario y los conocimientos teóricos que piden no hemos sido capaces de demostrarlo en la Entrevista? ¿Realmente otra vez tendremos que hacer frente a todo el proceso de nuevo: pruebas físicas, teoría, ortografía, etc?
Todos los que hemos pasado por un proceso de oposición publica sabemos lo ingrato que es sino se consigue el resultado, porque nos recorre una sensación subjetiva (y falsa) de que es como retornar a la casilla de salida con la sensación de que nada de lo hecho ha valido la pena.
Entre las diversas variables que pueden hacer disminuir nuestro rendimiento en la prueba de Entrevista o, a la hora de rellenar un Test de Personalidad o un Cuestionario de Información Biográfica (CIB o Biodata), se encuentra el Estrés.
El denominado estrés positivo es aquél que nos ayuda a conseguir un mayor rendimiento en nuestra ejecución, se trata de ese “empujón” que necesitamos y nos viene muy bien en determinadas situaciones que de pensarlo nos atenazarían más. Sin embargo, el estrés deja de ser un facilitador de nuestra producción cuando sobrepasa un determinado limite, donde no solo dejar de servirnos como ayuda sino que se transforma en nuestro peor aliado.
En toda prueba selectiva se ponen en juego múltiples factores, y, por qué no decirlo, también algo de suerte, pero si bien ésta última no la podemos controlar o predecir, la parte que nos toca de manera directa, como es una buena preparación de las pruebas, es lo que no podemos dejar en manos del azar.
Igual que para maximizar los resultados de unas pruebas físicas, acudimos a un preparador profesional en la gestión deportiva y/o nutricional, o acudimos a un preparador teórico que nos ayude con distintas metodologías de estudio (esquemas, pomodoros, mapas mentales, etc) para el test de conocimientos, en la fase de entrevista tenemos que acudir a profesionales del comportamiento que nos hagan potenciar y brillar lo mejor que cada uno de nosotros traemos de base.
Os aseguramos que no hay peor sensación que la de sentirse que no se ha dado el 100% de lo que se tenia a la hora de conseguir un resultado. Uno puede autoreprocharse más o menos cuando el resultado obtenido no es el esperado, y dependerá de si el NO APTO ha venido por condiciones ajenas a nosotros (falta de tiempo de estudio, conocimiento desconocido, situación personal incompatible con estudio, etc) o si viene por causas en las que directamente nosotros somos los realmente protagonistas (no haber dado todo lo que teníamos cuando verdaderamente era posible).
En ésta última opción existe a su vez una doble variante: ¿ha sido producto de nuestra propia falta de interés o por tener la sensación de que hubo algo que nos lo impidió? Hay pocas sensaciones que se igualen a la que se tiene al salir de una Entrevista real de oposición y decir “no estoy conforme con mi comportamiento en la entrevista, si bien conocía lo que se evalúa en la entrevista, no he sabido controlar mi comportamiento y he sido incapaz de hacer ver al tribunal quién soy realmente y convencer del porqué soy un buen candidat@ para la profesión policial”.
Todo lo descrito hasta ahora no es un exclusivo de un entorno de entrevista, sino que es extrapolable a otras situaciones reales que pueden vivirse en cualquier momento de la profesión policial y con consecuencias mucho peores que las de no superar un proceso selectivo, pero para poderlo conocer mejor os invitamos a que leáis la próxima entrega de nuestro Blog.
¿Quieres Hackear tu entrevista para vitar esa sensación? REGÍSTRATE
Etiqueta:Estrés, Factores, Guardia Civil, Personalidad, Policía Local, Policía Nacional